
Por Sophia Hernández.
Sebastián Holguín, un joven de 15 años de edad oriundo del municipio de Santander de Quilichao, persigue el sueño de ser el mejor ciclista en descenso del mundo, a su corta vida ya ha participado en competencias internacionales en Argentina, Ecuador, Perú y Estados Unidos representando con orgullo a Colombia.

Sebastián ha contado con el apoyo de su padre German Holguín Solarte, un reconocido atleta en downhill (ciclismo de descenso) con el que ha compartido victorias, derrotas y experiencias “Desde pequeño observaba a mi papa y quería ser como el” comentó. Desde los 4 años empezó a montar bicicleta hasta practicar downhill como su padre, a los 6 años ya participaba en competencias nacionales y departamentales pero la sorpresa llego a su vida cuando al cumplir 8 años estaba entre los tres mejores ciclista de todo el país.
El joven Holguín cursa el grado decimo en el Instituto Educativo José Francisco de Caldas y reside en el barrio los Guaduales, a pesar de las responsabilidades que tiene en el colegio Sebastián ha sabido a encontrar el equilibrio entre el estudio y el deporte, “me considero una persona disciplinada, quiero ser un gran deportista pero también quiero graduarme con buenas notas y sentirme orgulloso de mis logros” expresó con firmeza, también agregó que cada vez que sale a una competencia su objetivo es conseguir la victoria por él y por su comunidad “No me avergüenza decir que soy de Quilichao, esta es mi tierra y por ella me seguiré esforzando cada vez más”
Este joven atleta entrena seis veces a la semana y utiliza una bicicleta de suspensión doble, especial para practicar downhill porque que le permite manejar en descenso. A pesar de que forma parte de la categoría pre juvenil su compromiso y talento le han permito destacarse y ganar en competencias de categoría elite, en el que participan muchachos de 18 y 19 años.
Ha participó cuatro veces en el evento internacional deportivo Panamericano, donde en una de las ocasiones quedo campeón, entre aplausos y gritos fue recibido al final de la meta por los espectadores, era la primera vez que un chico tan joven alcanzaba la victoria en una competencia de tan alto nivel “Hasta ahora este ha sido mi mayor logro, a veces lo recuerdo y no puedo creer que realmente yo, hubiese ganado” reveló.

Aunque su habilidad para el downhill es innata no ha contado con el apoyo de organizaciones que lo patrocinen, su respiración se hizo lenta y afligido nos comentó que cada vez que surgía alguna actividad su familia debía correr con los gastos «Cuando veo que se realizara una competencia fuera del país siento que mi lugar es estar allá y mis padres hacen todo lo posible por costear el viaje» dijo, pese a esto, al llegar a la pista luce con orgullo los colores de la bandera de Colombia y agradece las oportunidades que la vida le regala, «no hay una formula mágica para convertirse en el mejor, es cuestión de esfuerzo, dedicación y sacrificio» comento.
Con tan solo 15 años ha probado el dulce sabor del triunfo sin perder la humildad, su próxima meta es ganar la Copa Cali que se realizara en la pista “la virgen” también conocida como ventiadero «mis expectativas son altas, mi objetivo es traer otra medalla a la región» finalizó.

Por los senderos más peligrosos y a grandes velocidades este talentoso ciclista demuestra que el miedo es simplemente una palabra, y que nada se interpondrá entre su camino para llegar a la meta.
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